Un nuevo tatuaje puede ser una experiencia emocionante. Sin embargo, hay ciertas precauciones que debes tomar para asegurarte de que tu experiencia sea segura y efectiva. Una de las preguntas más comunes que la gente tiene antes de hacerse un tatuaje es: “¿Debería afeitarme antes de hacerme un tatuaje?” La respuesta corta es: No.
¿Por qué no deberías afeitarte antes de hacerte un tatuaje?
Afeitarse puede ser un proceso arriesgado. Implica sostener una cuchilla afilada contra tu piel y rasparla para eliminar los vellos. Este proceso puede causar irritación en la piel, lo que puede complicar el proceso de tatuado.
Además, si te haces un corte o una quemadura mientras te afeitas, el tatuador no podrá trabajar en esa área. Esto se debe a que la piel está dañada y tatuar sobre ella puede aumentar el riesgo de infección y dificultar la retención del pigmento del tatuaje.
Si te saltas una zona al afeitarte, será necesario volver a afeitar todo el área. Si ya has irritado tu piel afeitándote de manera agresiva, existe un mayor riesgo de que te hagas un pequeño corte, lo que podría hacer que tu cita para el tatuaje se cancele.
Si no te afeitas lo suficiente, tendrás que volver a afeitarte. Como mencionamos anteriormente, esto no es ideal, especialmente si la zona a tatuar es el cráneo o alguna zona en la que crezca vello o pelo de forma rápida (por lo general más de 72 horas).

¿Qué deberías hacer en su lugar?
En lugar de afeitarte tú mismo, es mejor dejar que el tatuador se encargue de ello. Los tatuadores son profesionales que saben cómo preparar la piel para un tatuaje de manera segura y efectiva. Ellos tienen las herramientas y los conocimientos necesarios para afeitar la piel sin causar irritación o daño.
Además, el tatuador puede afeitar solo el área que se va a tatuar. Esto es importante porque afeitarse una zona más grande de la necesaria puede causar irritación innecesaria en la piel.

Hacerse un tatuaje es una decisión importante que debe tomarse con seriedad. Parte de esa seriedad implica prepararse adecuadamente para la experiencia. Aunque puede parecer una buena idea afeitarse antes de hacerse un tatuaje, es mejor dejar esa tarea en manos de un profesional. De esta manera, puedes asegurarte de que tu piel esté en las mejores condiciones posibles para recibir tu nuevo tatuaje. ¡Recuerda, un tatuaje seguro es un tatuaje feliz!.